Son innumerables los beneficios de contar con una instalación de suelo radiante en casa. Una de ellas y la principal, es la impresión de comodidad y habitabilidad que produce tanto en verano como en invierno. Y es que con el mismo método se pueden obtener ambas opciones de climatización, algo que ya es una gran ventaja en comparación con otros sistemas. Pero no solo existe esta, sino que hay muchas más.
Este método se instala bajo el suelo del hogar, oficina o cualquier otra superficie, tomando como idea la que ya tuvieron previamente los romanos y árabes con sistemas similares aunquemás rudimentarios y con los materiales de que disponían en la época.Se basa es hacer emanar del pavimento el calor o el frío, para lo que se instala una red reticular de tubos de polietileno y otros materiales que cada vez son más resistentes y están mejor dotados para este tipo de instalaciones.
Actualmente hay varias opciones para contar con este sistemaen cualquier estancia o local. La que funciona mediante agua que circula por los tubos, o mediante electricidad sin agua. Aunque ambas ofrecen las mismas prestaciones con algunas diferencias.La modalidad de agua resulta desde el principio la más eficiente económicamente hablando porque no precisa de un consumo energético elevado; y es que calienta el agua a bajas temperaturas. La opción eléctrica, sin embargo, precisa de un consumo mayor porque su tiempo de arranque es inmediato, lo que eleva al principio el consumo.
Así pues, este sistema es compatible con todo tipo de suelos, ya sean de cerámica, tarima, parquet o loseta de cualquier material. También es compatible con todo tipo de energías como la eléctrica, térmica, geotérmica, solar o eólica; aunque en general, el mejor rendimiento se da con energías renovables ya que permiten a largo plazo un ahorro y ofrecen un impacto medioambientalmucho más bajo. En concreto, la combinación con el sistema de aerotermia ofrece muchas ventajas, y es que este método aprovecha el aire del exterior para calentarlo o enfriarlo según convenga, y así después hacerlo circular en el interior del inmueble.
La instalación de suelo radiante en obra nueva no ofrece ningún obstáculo ya que se dispone bajo el pavimento en una red de tubo bien acoplada y que recorre toda la superficie, siendo toda ella la responsable de emitir calor para conseguir esa sensación que todo el mundo anhela con su sistema de calefacción.