Pautas para reclamar por una negligencia médica

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La negligencia médica es el acto que ejecuta un profesional sanitario y que por acción u omisión se desvía de las normativas o preceptos comúnmente aceptados en medicina y debido a esto causa una lesión o daño, ya sea físico o moral al paciente y/o sus familiares.

Una negligencia médica puede ser el abandono en el parto y los consiguientes daños para la madre y el feto pero también un error de prescripción de medicación, la deficiente realización de una intervención, un deficiente seguimiento en el postoperatorio, errores o retrasos diagnósticos, omisiones en el deber de información al paciente (consentimiento informado)…

En Derecho no se habla tanto de las negligencias médicas, sino de infracción de la Lex Artis ad hoc. Cualquier desviación conforme a los principios estipulados que aseguren el mejor tratamiento para el paciente, es contraria a la Lex Artis y, por lo tanto, constituye una negligencia médica.

 

¿Cómo debe reclamarse una negligencia médica?

 

Documenta la negligencia:

  • Hacer un resumen de todo lo sucedido: horas, quiénes intervinieron, etc.
  • Tomar fotografías de las lesiones si son externas. Los médicos y peritos pueden valorar a posteriori las lesiones, pero una imagen vale más que mil palabras.
  • Recopilar todos los informes médicos previos y posteriores a la negligencia.

 

Solicita el historial clínico:

Debes acudir al centro sanitario donde ha ocurrido la negligencia y pedir un formulario de solicitud de historia clínica.

Es muy importante que marques o dejes constancia en la solicitud que el expediente incluye los siguientes datos:

  • Copia íntegra de la historia clínica;
  • Notas médicas de la evolución del paciente;
  • Notas de enfermería;
  • Pruebas diagnósticas;
  • Consentimientos informados;
  • Protocolos quirúrgicos;
  • Hojas de tratamiento;
  • Registro cardiotocográfico (monitorización) y partograma. Sólo en caso de problemas durante el parto o el embarazo.

 

Exigir la documentación:

Cualquier entidad sanitaria, pública o privada, dispone de un mes para entregar la historia clínica. Si transcurrido ese mes, no has recibido respuesta o esta es negativa, tiene tres opciones:

  1. Requerir de nuevo el historial clínico al centro que te ha atendido: suele ser efectivo pues los centros sanitarios están obligados a entregar los documentos antes referidos en virtud de la Ley de Autonomía del Paciente y la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal.
  2. Denunciar al Centro ante la Agencia Española de Protección de Datos: un proceso con un plazo muy extenso que puede durar más de dos años y que puede suponer que la historia clínica nos sea finalmente entregada cuando hayan prescrito los plazos para poder reclamar.
  3. Iniciar un Procedimiento Civil: conocido como Diligencias Preliminares, para conseguir la información requerida, lo que puede demorarse tan solo unos tres meses. Para la tramitación del mismo es necesaria la intervención de un procurador o de los abogados especialistas en negligencias médicas.